Uno de ellos le dijo que le iba a pagar a través de Mercado Pago e hizo la gestión. Después le mostró su celular para darle a conocer el “comprobante de pago”. El cocinero le envió por privado al dueño del local si le había llegado la transferencia y este le dijo que no.

Los condenados haciéndose los desentendidos le volvieron a exhibir el comprobante al cocinero como que la transacción se había realizado. El dueño llegó al lugar habló con los estafadores y, en ese momento pasó un móvil policial. Se le dio a conocer a situación y ahí corroboraron que Monardez y Atampiz Sanz habían usado la aplicación trucha de la billetera virtual